Existe una gran variedad de tipos de arcillas, tanto de uso externo como interno.
Este tipo de barro se produce a causa de la descomposición de las rocas madre que son cristalizadas, como, por ejemplo, el granito.
Químicamente, está compuesta por el silicato de alúmina hidratado, junto a varios óxidos minerales, entre las cuales se destaca el hierro, el silicio, el magnesio y el aluminio.
La arcilla es utilizada desde la edad antigua para curar y desinfectar heridas, todo tipo de afecciones cutáneas e incluso procesos inflamatorios.
Ya en Egipto, se usaban los barros calientes procedentes del Nilo para tratar las afecciones reumáticas.
En la actualidad, las arcillas se usan sobre todo en el mundo cosmético, teniendo múltiples usos, pero quizá el más conocido y extendido, sean las mascarillas faciales.
Las arcillas, nos aportan innumerables beneficios para la piel y el cabello, entre los que podemos destacar los siguientes:
Consigue mantener la humedad natural de las fibras capilares, la elasticidad, aumentar los niveles de oxigenación, reconstruir nuestro cabello, regular la producción de sebo y estimular su crecimiento.
Favorece la regeneración celular, promueve la exfoliación de la piel y cuero cabelludo, alisa y suaviza la piel, elimina las bacterias, entre otros muchos.
Antes de usar una arcilla, debes conocer las necesidades de tu piel, ya que cada tipo, atiende a unas características concretas.
Hoy, en este post, veremos las propiedades específicas de la arcilla verde, sus recomendaciones y usos, así que si quieres saber si es la tuya y los beneficios que te aporta, sigue leyendo.
De entre todas las arcillas, la verde es una de las más conocidas, ya que sus usos terapéuticos y cosméticos comprenden actividades calmantes, depurativas y desintoxicantes tanto para la piel como el organismo.
Se caracteriza y distingue por su color verde, lo que la diferencia fácilmente del resto de arcillas y su textura es ligeramente más granulosa.
Su color verde característico proviene del óxido de hierro y magnesio.
Dentro de las arcillas verdes, encontramos distintos tipos, de las que podemos destacar la caolinita y la illita, siendo esta última la más usada en cosmética por su gran poder limpiador, gracias a su composición con más calcio y menos magnesio.
Las propiedades curativas de la arcilla verde se deben a las altas concentraciones de diversos minerales, entre los que podemos destacar el silicio, potasio, cal y fosfatos.
La arcilla verde tiene un gran poder astringente, por lo que es capaz de absorber todo tipo de grasas, impurezas, toxinas y bacterias, acumuladas en nuestra piel.
Sus principales usos y beneficios para la piel son:
1.- Peeling natural, ya que tiene un gran poder exfoliante, eliminando las células muertas y promoviendo la regeneración celular.
2.- Antiarrugas, es un gran aliado para eliminar las líneas de expresión, ya que es capaz de eliminar la primera capa de la epidermis, alisando nuestra piel sin agresión.
3.- Limpiadora, depura nuestra piel eliminando tejidos muertos y las bacterias que dan lugar la aparición de puntos negros, ayudando también a controlar las infecciones cutáneas que se producen por acné.
4- Unifica el tono de nuestra piel y matifica.
5.- Calmante, elimina el dolor y la inflamación, junto con su poder bactericida, es muy buena para desinfectar heridas y quemaduras, haciendo que estas cicatricen mucho más rápido y evitando la aparición de cicatrices y manchas.
6.- Relajante, gracias a su composición y al aporte de minerales y sales, es capaz de aliviar el dolor y la inflamación muscular.
La arcilla verde es un gran aliado para el tratamiento de pieles grasas, ya que es capaz de controlar el sebo, eliminar impurezas, desobstruir, cerrar los poros dilatados, prevenir infecciones e impedir que debido a la formación de granos aparezcan marcas en la piel.
Cuando hablamos de arcillas, no podemos olvidar los beneficios que estas nos aportan a nuestro cabello y cuero cabelludo.
Como ya hemos visto, la arcilla verde, es un potente aliado a la hora de controlar el exceso de sebo, por lo que es uno de los imprescindibles si tienes problemas de grasa capilar.
Además de controlar el sebo, fortalece los folículos pilosos, haciendo que nuestro cabello crezca más fuerte y sano.
Puedes encontrar la arcilla en múltiples formatos, como en polvo, mascarillas humedecidas, pastillas, en jabones, champús, etc..
A continuación, te dejamos los enlaces a los productos que realizamos con esta maravillosa materia prima natural, fuente de tantos beneficios, tanto para tu piel como para tu cabello.
Nos vemos en el siguiente post.